Todo comienza el día que salimos de clases por las elecciones parlamentarias que se realizarían el 6 de diciembre, salimos aproximadamente el primero de diciembre, sólo queríamos que llegara el muy nombrado 6D para las elecciones... En fin nadie en nuestra casa pensaba que era navidad, ni luces, ni arbolito decoraba la casa, parecía mitad de año, vacaciones, sin nada que hacer y todo siendo aburrido; así pasaron los días, acostandome tarde, tres cuatro de la mañana, levantandome igualmente tarde. Hasta que llegó el 24 de diciembre...
Cuando llegó el 24, mi familia estuvo preparando la comida para la cena de navidad toda la tarde, varios tíos que habían venido de visita ayudaron también y así casi ningún cambio drástico o relevante. Cuando se hizo de noche, los niños del barrio explotaban fuegos artificiales como si no hubiese un mañana. Mi familia se arregló, se vistió muy atractivamente para sólo pasar el rato sentado en el sillón de la casa viéndose las caras. Llegaron las 12 y a un primo pequeño se le dio su regalo y los demás familiares se fueron a dormir sin más que hacer.
Así concluyo, esas fueron mis navidades en familia y parte de lo que hice en ellas.
Victor Omaña N°21
domingo, 28 de febrero de 2016
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